Los errores más comunes al elegir un nombre de dominio y cómo evitarlos
Elegir el nombre de dominio para tu proyecto online es un paso que puede marcar la diferencia entre el éxito y el olvido. Aunque parece una tarea sencilla, muchos emprendedores y empresas cometen errores que después les cuestan tráfico, credibilidad o incluso problemas legales. Un mal dominio puede confundir a tu audiencia, dificultar tu posicionamiento en buscadores y hasta dañar tu imagen profesional.
Conocer estos fallos habituales te ayudará a tomar una decisión más estratégica y a construir una presencia online sólida desde el primer día.
Errores que debes evitar a toda costa
A continuación, encontrarás una lista de los fallos más frecuentes que se cometen al registrar un dominio. Evitarlos no solo te ahorrará dolores de cabeza, sino que también te permitirá proyectar una imagen profesional, coherente y memorable para tu marca.
1. Elegir un dominio demasiado largo
Un nombre interminable es difícil de recordar, más propenso a errores de escritura y complicado de compartir verbalmente. Si para decirlo tienes que tomar aire o deletrearlo varias veces, es demasiado largo.
Ejemplo real: Thebestfloristservicesinbarcelona.com es imposible de recordar y escribir bien a la primera. Mucho mejor sería floristeriabarcelona.com o floresexpress.com.
Consejo: lo ideal es mantenerse entre 6 y 14 caracteres, evitando frases extensas o combinaciones innecesarias.
2. Abusar de guiones o números
Aunque un guion pueda ayudar a separar palabras, en la práctica genera confusión. Las personas no saben si escribirlo con o sin guion y, en la comunicación oral, el mensaje se complica (“es con guion medio entre las palabras…”).
Ejemplo real: viajes-economicos-2025.com no solo es difícil de recordar, sino que transmite poca profesionalidad.
Con los números pasa algo similar: no está claro si se deben escribir como cifra o como palabra.
Consejo: evita guiones y números siempre que puedas.
3. Ignorar la facilidad de pronunciación
Tu dominio no solo se lee, también se dice. Si es difícil de pronunciar, los usuarios lo recordarán mal o lo escribirán de forma incorrecta.
Ejemplo real: una marca de catering con dominio xquisitcatering.com quiso ser creativa con la palabra “exquisite”, pero terminó recibiendo constantes errores de escritura y búsquedas erróneas.
Consejo: pronuncia tu dominio en voz alta y pide a varias personas que lo repitan; si fallan, busca otra opción.
4. Usar marcas registradas de terceros
Registrar un dominio que contenga el nombre de una marca reconocida puede ser un error costoso. Además de perder el dominio, podrías enfrentarte a acciones legales.
Ejemplo real: alguien registró nikeoutletbarato.com y tuvo que entregarlo a la marca por infracción de propiedad intelectual.
Consejo: consulta la base de datos de marcas (en España, la OEPM; a nivel internacional, la OMPI) antes de registrar.
5. No pensar en el largo plazo
Es común elegir un dominio con palabras de moda o relacionadas con un producto concreto, pero eso puede limitarte en el futuro.
Ejemplo real: una tienda que empezó vendiendo solo gafas con el dominio gafaslowcost.com tuvo problemas al expandirse a otros accesorios, porque el nombre ya no representaba toda su oferta.
Consejo: apuesta por nombres atemporales y flexibles que permitan crecer y diversificar.
6. No comprobar la disponibilidad en redes sociales
La coherencia de marca es clave. Si tu dominio está disponible pero el nombre de usuario en redes no, puedes acabar con una identidad fragmentada.
Ejemplo real: una startup registró viajesconalma.com, pero en Instagram el nombre estaba cogido y tuvo que usar @viajesconalma_oficial, lo que dificultó que la encontraran.
Consejo: usa herramientas como Namechk o KnowEm para verificar disponibilidad en redes antes de decidirte.
7. Descuidar la extensión adecuada
La extensión (.com, .es, .org, etc.) no es solo un detalle técnico: influye en la confianza del usuario y en la percepción de tu marca.
Ejemplo real: una empresa española con .info perdía tráfico hacia un competidor que tenía el .com con el mismo nombre.
Consejo: si puedes, registra siempre el .com. Si tu mercado es local, combina el .com con la extensión geográfica correspondiente.
8. No registrar variaciones importantes
Un competidor o incluso un estafador podría aprovecharse si no registras variantes clave de tu dominio.
Ejemplo real: una empresa tenía mimarca.com pero no registró mimarca.es, y otra compañía lo usó para ofrecer un producto similar, generando confusión.
Consejo: registra las variantes más obvias y redirígelas a tu dominio principal.
9. Ignorar el impacto en SEO
Aunque Google ya no prioriza tanto las palabras clave exactas, tener un término relevante en tu dominio puede ayudar a que sea más comprensible para el usuario y, por ende, más clicado.
Ejemplo real: consultingdigital.com transmite inmediatamente el sector, mientras que zxlgroup.com no dice nada y depende totalmente de la marca para ganar reconocimiento.
Consejo: incluye palabras clave solo si encajan de forma natural.
10. No proteger los datos del registro
Cuando registras un dominio, tus datos pueden quedar públicos en la base WHOIS, lo que abre la puerta a spam o intentos de fraude.
Ejemplo real: un profesional registró su dominio sin privacidad y comenzó a recibir llamadas de supuestos “proveedores” que querían cobrarle por servicios falsos.
Consejo: activa siempre la privacidad de WHOIS que ofrecen la mayoría de registradores.